Zita Finol (CDMX, 1940-2013). Es una de las autoras que ocupa un lugar distinguido entre los aires del periodismo y la literatura en la ciudad de Cancún, donde residió desde 1997. En estas tierras caribeñas recibió el Premio Estatal de Periodismo por su columna Vitrales en el periódico Por Esto. Finol ha publicado Amor sin arras (Inba, Teatro, 1959); cuentos Cuando perdí aquello, (Edamex, 1983) y trabajos como Brujos o científicos, (AHR Editores,1977), Mi vida, biografía de Amparo Montes (Edamex, 1988). En poesía: Canto nuevo, en 1981 y Sonata a ocho voces, en1982, de Editorial Selet; Los entornos de la rosa, 2006, de la Universidad el Caribe;Cantos de agua, 2012, del cuaderno 7, de Gaceta del pensamiento.
Su último poemario publicado se presentó en la Casa Internacional del Escritor de Bacalar, donde se llevó de cabo el festival de poesía Oxígeno 2012, organizado por el poeta Ramón Iván Suárez Caamal.
En este poemario, Cantos de agua, podemos encontrar un lenguaje retórico con cierto misticismo. La autora expresa una reflexión cargada de vitalidad, su voz invoca, es agua viva, tal es el caso del siguiente poema:
Que no te callen tu voz
No dejes que te callen tu voz,
que rota muera en tu garganta
clamando libertad,
dale a esa libertad un mundo
donde el pensamiento, ave sonora,
en el cielo trace del Hombre su perfil,
y si el verdugo tu palabra calla.
dile que tiene mil ecos
¡ y ellos le darán batalla!
En una mirada introspectiva, Zita nos dice:
Hoy has visto
Hoy has visto la muerte pasar,
la gente a tu lado murmuraba
palabras que a ti te sorprendieron.
Vivir es, saber que se es,
lo gritan las venas de todo tu ser,
morir, oculto rostro del dormir,
es de tu cuerpo dulce reposo
donde el alma prisionera escapa
peregrina de espacios siderales.
Matar, siega brutal de vida,
es dejar vibrando discordante
una nota suspendida en el vacío.
Y con las personas que ama, escribe:
¡Corre Juan Pablo, corre!
Corre Juan pablo, corre.
que te gana el tiempo
el cuenta sus arenas,
tu cuentas corales;
pintas amaneceres
el sabe de ocasos;
la llegada espías
de los tiernos brotes;
el mira caer las hojas.
Su magia es de luces,
se oculta en las sombras,
cuando libre te sientes
te torna vasallo.
¡Corre Juan Pablo, corre!
Vence al tiempo con tus sueños,
pule las gemas que a él le robas
y calza con ellas
las huellas de tu vida.
Frecuentemente en sus versos Zita Finol nombra a Juan Pablo, tal vez, para él están dirigidos sus cantos de agua; la autora en ciertas ocasiones conversa con él en un tono infantil y en otros momentos con una voz madura. Lo podemos notar en el siguiente poema:
El regreso
He iniciado el regreso
y aún viaja conmigo
mi cristal de niño.
En tan largo viaje
fue el mejor amigo
que mis pies cubrió
con el suave abrigo
que tejió su risa.
Con su fantasía
puse luces al paisaje
y perdida la ruta
esperé que pronto
se abriera el camino
gracias a la magia
de su alegre canto.
El dolor dejó su huella
mas su fe fue sombra
su esperanza estrella,
y al sufrir la derrota
de ser sólo un hombre,
me enseño a rezar.
Por otra parte, es importante mencionar que este cuadernillo de poemas, está ilustrado por la pintora y muralista Fanny Rebel; a continuación algunos de sus dibujos:
Para finalizar y agradecer a Zita; este poema; aquí nos aconseja ser más atentos al lenguaje del tiempo:
A tiempo
No tengas prisa, no corras de más,
deja al tiempo su ritmo
y a la rosa su botón…
ya que el quebranto
llamará a tu puerta
y las risas cruzarán tan leve
que acaso ni sus pasos
sentirás pasar.